La etapa infantil es, sin duda, la más importante y significativa de una persona, pues es aquella en la que vamos cimentando nuestra base, acompañada de los cambios biológicos y psicológicos propios del desarrollo.
La etapa de la adolescencia es otra de las fases clave de la vida. El cuerpo se transforma y experimenta grandes modificaciones a nivel físico y mental. Durante esta fase tiene lugar el desarrollo madurativo de la persona.
La etapa de la vida adulta es la más extensa, y, por tanto, es donde tienen lugar la mayoría de acontecimientos relevantes en la vida de una persona.
La terapia de pareja es necesaria cuando observamos que la relación está deteriorándose. Verdaderamente, es necesario que los miembros de ésta estén de acuerdo en comenzar a realizar este proceso, pues ambos van a necesitar comprometerse y esforzarse en el cambio.
Los talleres grupales están destinados a la prevención y a la formación en las diferentes materias que ocupa la psicología clínica.